La propuesta fue hacer un Twitter chat de una hora con un grupo de personas acerca de cuentos digitales en la sala de computación..
Al llegar allí ví y sentí en mí y en otros el “susto” por no saber a qué nos enfrentábamos.
Esperaba explicaciones y ví que no las había.
Miré a mi alrededor y me sentí realmente perdida….esperé y la actividad comenzó… si no me animaba, el Twitter chat, para mí quedaba atrás …
Todos estaban compenetrados en sus IPADS….yo decidí tocar y probar y dar lo mejor de mí .
Entendí que las preguntas venían en forma consecutiva y lenta. Entendí que se usaba Q y A para preguntar y responder. Nació en mí otro entusiasmo. Ví que comenzaba a tomar otra confianza y me encerré en mis “pequeños grandes logros”.
Ví que el tiempo pasaba rapidísimo y sentí que no quería cerrar la actividad…aprendí a utilizar #para responder a colegas y mi entusiasmo creció…
Fue una experiencia increíble. Ojalá se repita.